Quienes hayan leído La Uruguaya, la novela de Pedro Mairal de 2016, probablemente hayan pensado que todo lo que se contaba era muy cinematográfico.

Se habrán imaginado los lugares de Montevideo y de Buenos Aires, las situaciones que se describen y habrán encontrado identificaciones con el escritor Lucas Pereyra, protagonista de la novela, o con los otros personajes.

Hernán Casciari.inquieto como es, le compró los derechos a Mairal para llevarla al cine y decidió financiarla de manera colectiva.

De esa forma comenzó a buscar productores asociados poniendo a disposición seis mil bonos a un valor de 100 USD cada uno para cubrir el costo de 600.000 USD que tendrá la realización del film.

Como la cuenta de la productora Orsai en Montevideo tardaba en estar operativa, un productor asociado ofreció su propia cuenta bancaria para recibir el dinero y no pagar la comisión. Lo curioso es que el productor era “Papelito” Fernández, quien jugara en Banfield en Argentina y en la selección uruguaya.

Por estos días se terminaron de recaudar los fondos y existe un cronograma que abarca todo el año en las distintas etapas.

Nada parece detener a Casciari: el proyecto es esperanzador.