A la hora de juntar a dos personalidades de la cultura mundial de estos tiempos, pocas ideas pueden ser mejores que un encuentro entre Caetano Veloso y Paul B. Preciado.
Este inusitado cruce de ideas se dio en el marco de la Fiesta Literaria Internacional de Paraty. El encuentro, denominado Transiciones, fue emitido el 5 de diciembre de forma virtual y puede ser visitado en YouTube.
Caetano es más que un músico. Preciado más que un filósofo. Caetano es un hombre de pensamiento, comprometido con su tiempo, un intelectual de una sinceridad y sencillez asombrosa. Preciado, que se define como disidente del sistema sexo género, no solo ha desarrollado sus ideas en contra del patriarcado colonial y del binarismo de género, sino que lo ha hecho carne con su propio cuerpo, al que ha transformado a partir de autoadministración de testosterona y el cambio de nombre de Beatriz Preciado a Paul B Preciado.
En un hora de charla que quedó corta, se habló de ficción y realidad, de la crisis terminal del capitalismo, de sexo y de género.
Preciado, que suele hablar de cosas duras con buenas formas y una enorme amabilidad, mostró su admiración por Caetano y lo miró como un chico festejando cada una de las intervenciones del artista brasileño. Fue también un cruce de generaciones: poco tiempo después que Caetano saliera de la cárcel, Preciado nacía en los comienzos de los años 70.
Pese a esa diferencia de edad ambos demuestran que para animarse a cambiar, para probar otras identidades y para poner el cuerpo -de la forma que fuere-, siempre hay tiempo.
Guillermo Cerminaro