Greta Van Fleet está próximo a publicar su segundo disco de estudio The Battle At Garden’s Gate, que saldrá a la luz el 16 de abril.
Campea en el aire la necesidad de sacase de encima el fantasma de Zeppelin. De no ser por el link que uno hace con la banda de Page y Plant, los Greta serían quizá la aparición más importante de los últimos diez años. Pero ese fantasma pone un interrogante. Por eso la necesidad que, luego de la espera, se muestren signos de madurez. El talento de la banda de Michigan, formada por los tres hermanos KIszka más el baterista Danny Wagner, es innegable.
En recientes declaraciones el vocalista Josh Kiszka trató de desprenderse de la sombra que los persigue:
“Creo que estamos en un momento donde podemos decir ‘Sí, Led Zeppelin es de gran influencia para nosotros’ porque estamos haciendo música que no se parece en nada a eso”
Por los tres singles que han adelantado, decir que no se parece en nada resulta una exageración, aunque sí se nota una búsqueda de un sonido más contemporáneo, más claro, menos crudo tal vez.
Son tres los singles conocidos hasta ahora: la bella Heat Above, Age of Machine, un tema de casi siete minutos de tintes épicos y My Way, Soon la más liviana de las canciones dadas a conocer.
Más allá de comparaciones es de esperar que Greta Van Fleet encuentre su propio sonido. Las influencias no solo son inevitables, sino hasta son deseables. Imposible escapar de ellas.
Guillermo Cerminaro