Días del futuro pasado – Un newsletter de Revista Spoiler

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Las declaraciones de este newsletter están inscriptas en su nombre mismo: “Días del futuro pasado” trabaja en dos líneas temporales que, estamos convencidos, se entrecruzan constantemente. La idea de la linealidad, a estas alturas, opera en formas misteriosas. Y, aunque estamos seguros de que mañana es mejor, también nos atrae la cuestión de la disrupción: ¿es, acaso, el mañana también parte del pasado?

Por eso, como todos los meses y con la excusa de una efeméride, recuperamos dos propuestas que, aunque bien distintas, tienen algo en común: la capacidad de, desde otros tiempos, seguir transformando el futuro.

A 50 años del disco debut de Black Sabbath
Brigadas Metálicas

Qué fácil parece todo cuando se mira para atrás. Porque, estoy seguro, alguna vez te hiciste esta pregunta: ¿cómo es que eso no se me ocurrió a mí?

Porque, suena lógico: ¿cómo fue que nadie había pensado en darle duro y parejo a la batería como si no hubiera un mañana? ¿cómo fue que nadie distorsionó la guitarra y tocó melodías repetitivas y pesadas? ¿cómo nadie había gritado palabras de rabia frente al micrófono?

Black Sabbath no solamente hizo eso, sino que lo hizo todo junto. Y a 50 años del lanzamiento de su disco debut, aunque suene difícil de entender cómo es que nadie lo había hecho antes, ellos –que inventaron el heavy metal-, siguen sonando más fuerte que la mayoría.

15 años después de la aparición de Avatar: La leyenda de Aang
Earth, wind & fire

Muchas veces las cosas trascendentes ocurren casi sin que nos demos cuenta. Y, casi siempre, las grandes cosas se revalorizan en retrospectiva: cuando Avatar: La Leyenda de Aang se emitió por primera vez hace ya quince años, nada hacía pensar que se convertiría en una de las grandes series animadas de la historia.

Porque, una vez desmalezada esa capa de humor veloz e infantil, lo que se cuenta es trascendente: la historia por alcanzar la iluminación, el tema del deber, la cuestión de la amistad y, sobre todo, de la redención.

Y aunque suene demasiado grande para una historia para niños, su tratamiento es impecable: con multiplicidad de lecturas, las aventuras de este niño pelado con una flecha en la frente, siguen siendo atrapantes a quince años de su aparición.